Es muy normal encontrarnos con puertas duras, las cuales resultan difíciles de abrir y cerrar y, sobre todo, son muy incómodas. Es importante conocer que esto puede ocurrir en cualquier tipo de puertas, no importa si son de buena o de mala calidad, o si su uso es frecuente o muy raro, ya que esto es causa de falta de lubricación.
Frente a esto hay que destacar que la solución es más que sencilla y que no requiere del trabajo de ningún cerrajero, sino que la podemos llevar a cabo nosotros mismos. Para esto solo necesitamos algún tipo de lubricante, ya sea vaselina, aceite, líquidos grasos o parafina.
Una vez que tengamos alguno de estos lubricantes en nuestras manos, lo que debemos hacer es localizar las bisagras y engranajes, colocando allí una generosa cantidad y nuestro trabajo habrá finalizado.
Pero, más sencilla que sea la solución, no debemos olvidar que es importante leer las instrucciones de uso del producto adquirido para evitar errores o sorpresas, y el trabajo saldrá a la perfección.
Las puertas se niegan a permanecer abiertos cuando las bisagras no son cuadrados y la plomada. A veces, esto ocurre cuando la puerta está instalada, si se hace incorrectamente. Más a menudo, se ha producido a causa de algún establecimiento, ya sea de la casa o la propia puerta.Si esto se ha convertido en un problema con uno o más puertas de su casa, usted puede preguntarse cómo solucionarlo. Este artículo cubre varios remedios. La primera sección le dará tres soluciones rápidas que pueden fijar su puerta. La segunda sección habla sobre cómo el nivel de las bisagras, que se solucionará el proble
Image viaWikipediaInstrucciones
Destornillador
Compruebe que las bisagras de la puerta para ver si están flojos. Si lo están, apretarlos. A veces esto es todo lo que se necesita para arreglar una puerta que no se mantendrá abierta. Debido a que su puerta no se abren, es más probable que haya un problema con la bisagra superior. Use revistas para apoyar a su puerta, mientras que se están apretando los tornillos para asegurarse de que obtiene con fuerza.
Vuelva a colocar los tornillos de las bisagras con tornillos más largos para añadir un mayor apoyo a las bisagras.
Si recientemente ha engrasado las bisagras, pruebe a quitar algo de la grasa, eliminando y limpiando cada pasador de la bisagra. El pasador de la bisagra es el pin que conecta las piezas de la bisagra. Se puede extraer tirando de él con unas pinzas. Puede que tenga que utilizar un conjunto de clavos y toque la parte inferior de la espiga para sacarlo.
Cierre la puerta y echar un vistazo a las bisagras. Uno de ellos es, probablemente, más en hacia la puerta que el otro. Ahora tiene dos opciones. Usted puede agregar una cuña entre la bisagra que está más lejos de la puerta, o se puede profundizar en la mortaja (el área donde la bisagra se sienta en el marco de la puerta) en la bisagra que está más adentro
Abra la puerta y coloque varias revistas para mantener su puerta.
Afloje los tornillos de la bisagra que está más cerca del marco de la puerta. Sólo es necesario evitar que se peguen en la mitad de la bisagra que está conectado a la estructura (no en el lado conectado a la puerta). Inserte una cuña entre la bisagra y el marco de la puerta. La idea es empujar la bisagra hacia la puerta.
Apriete los tornillos y compruebe la puerta. Si parece extraño o si no se soluciona el problema, entonces usted necesita para pasar a la etapa 6.
Retire la puerta y retirar los tornillos de la bisagra que cuelga más adentro
Profundizar en la mortaja (área en la que la bisagra está en reposo) con un cincel.
Vuelva a colocar la bisagra y el rehang la puerta.
Quitar un eje de articulación de las bisagras. Colóquelo en un vicio y golpee con un martillo hasta que se inclina un poco.
Vuelva a colocar el pasador de la bisagra.
Prueba de la puerta. Si el problema persiste, repita los pasos 1 y 2 con la bisagra de la segunda y tercera hasta que se resuelva el problema.
